Antonio Ramos Oliveira (1907- 1973) es uno de los andaluces más desconocidos del exilio español. Formó parte del exilio republicano —el europeo en Londres y el americano en México—, y fue estrecho colaborador de Negrín y otros políticos e intelectuales de la II República. Realizó una importante labor periodística y su obra como historiador, en especial su Historia de España, goza de prestigio entre historiadores españoles y anglosajones. También tuvo una función relevante en los comienzos de la ONU; sin embargo, su nombre apenas sonó en la recuperación de la memoria. Parte de su obra permaneció inédita durante décadas o está en inglés. El sino discreto del hijo del carpintero
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