Los sistemas de tiempo real se diseñan para interactuar con agentes externos, bien sean estos dispositivos de cualquier tipo o el propio ser humano. Esta interacción se materializa por un lado, en un conjunto de eventos de entrada al sistema, generados por los agentes externos; y por otro, en el conjunto de eventos reacción, producidos por él en respuesta a dichos eventos de entrada. Al verse sometidas las respuestas a restricciones temporales, el factor tiempo adquiere una importancia fundamental durante el proceso de diseño, haciéndose necesario en algunas ocasiones la utilización de tecnologías paralelas o distribuidas. Diseñar sistemas de tiempo real usando este tipo de tecnologías, conseguir en la medida de lo posible un buen aprovechamiento de ellos, y garantizar el cumplimiento de las restricciones de tiempo, se convierten en una tarea de gran complejidad, imposible de realizar sin el concurso de herramientas especiales orientadas a medir y analizar el comportamiento de los sistemas. En este artículo se presenta un conjunto de herramientas desarrolladas para realizar este cometido, utilizables en sistemas multiprocesadores basados en redes de transputers (T800 ó T900).
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