Estibaliz Alonso Saratxaga, Ana Paz Cinos Juanes, Mar Hernández Moliner, Alfonso Sánchez Mayoral Moris
• Las vulvovaginitis son procesos que cursan con inflamación de la piel y/o mucosa de la vagina.
• Pueden ser infecciosas o no infecciosas. Las infecciosas más frecuentes son: candidiasis, vaginosis bacteriana y tricomoniasis. Las no infecciosas más frecuentes son: atrófica e irritativa.
• La candidiasis cursa con prurito, disuria, escozor, dispareunia y un flujo blanco, grumoso, sin olor, que parece yogur. Se trata con imidazólicos tópicos o fluconazol oral.
• La vaginosis bacteriana cursa sin inflamación vulvovaginal y con un flujo vaginal más abundante y maloliente. Se trata con metronidazol o clindamicina tópicos o metronidazol oral.
• La tricomoniasis es una infección de transmisión sexual (ITS). Es la ITS curable más frecuente en el mundo.
• La tricomoniasis cursa con leucorrea más abundante, maloliente y amarillo-verdosa, irritación vulgar y vaginal y dispareunia. Se trata con metronidazol o tinidazol oral.
• El diagnóstico de las tres anteriores se basa en la realización de una correcta anamnesis, exploración de genitales y recogida de exudado vaginal.
• La vulvovaginitis atrófica cursa con sequedad y genitales externos adelgazados; se produce, por ello, picor y disuria. Se trata con lubricantes libres de estrógenos o estrógenos tópicos.
• Respecto a las vulvitis no infecciosas, estaría indicada una biopsia de piel si fracasa el tratamiento, no identificamos las lesiones dermatológicas o ante la sospecha de lesión vulvar intraepitelial.
• Las ITS (gonorrea y clamidia) pueden cursar con leucorrea, pero no producen vulvovaginitis, sino cervicitis, y para su diagnóstico no es suficiente la recogida de exudado vaginal, sino que debe ser endocervical.
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