Se presenta un caso clínico de un escolar que tras el reconocimiento médico-deportivo (RM-D) se sospecha que presenta desalineaciones estáticas y dinámicas en el plano sagital del raquis, así como cortedad isquiosural marcada, tras lo que se remite a especializada para su seguimiento y tratamiento oportuno.
El interés de este caso radica en la elevada frecuencia con la que el Médico del Deporte puede detectar estos casos en los RM-D, pero al no ser frecuente que lleve su tratamiento, suele desconocer su evolución, con lo que se suele perder el interés de seguir diagnosticando estos procesos y, consecuentemente, no pueden tratarse adecuadamente durante el crecimiento. Este caso clínico puede servir para reafirmar la labor preventiva de los RM-D respecto al aparato locomotor, ya que muchas de sus desalineaciones no son diagnosticadas en atención primaria; asimismo, cuando se aplica un tratamiento adecuado y de forma precoz la tendencia es hacia la resolución de estos procesos.
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