Planificada en 1945 y construida entre 1952 y 1968, la ciudad finlandesa de Tapiola fue concebida como un laboratorio urbano en el que ensayar, a escala reducida, soluciones aplicables en el proceso de reconstrucción del país tras la segunda guerra mundial. Desde el inicio, la preocupación por la infancia orientó unas investigaciones que encontraron su principal impulso en el deseo colectivo de avanzar hacia una sociedad cohesionada y democrática, base sobre la que debía fundarse dicha reconstrucción. En este contexto el pensamiento humanista de Lewis Mumford, que invitaba desde las páginas de La cultura de las ciudades a situar la educación en el centro de la reflexión sobre la ciudad, tuvo una gran repercusión en el urbanismo finlandés, una influencia que se puede ver reflejada en la configuración final de Tapiola. El presente artículo aborda un análisis de esta iniciativa que tiene como objetivo la identificación y la valoración crítica de las estrategias proyectuales que guiaron la implementación de los principios teóricos de Mumford en el caso de estudio. Dicha aproximación permite indagar sobre una experiencia conocida desde una perspectiva distinta: la infancia y la educación como categorías de análisis, que revela la gran capacidad transformadora de estos conceptos y su papel central en toda reconsideración de la ciudad cuyo propósito sea la humanización del espacio construido.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados