Más que un objeto hacia el que orientarnos, cada paisajes es un punto de partida de pensamientos y acciones. Así, no cabe pensar ese paisaje como una parte del mundo, sino el mundo desde y con el paisaje. Lejos de corresponder únicamente a la estética, la mirada tiene también una dimensión moral: la precaución, el respeto y la moderación, formas sensibles que pueden convertirse en un principio de acción.
More than an object, each landscape is a starting point for thoughts and actions. Thus, we cannot think of the landscape as a part of the world, but rather the world from and with the landscape. Far from corresponding only to aesthetics, the gaze also has a moral dimension: caution, respect and moderation, sensitive forms that can become a principle of action.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados