La consultora McKinsey señala que en 2030 hasta 1,6 millones de trabajadores podrían verse forzados a cambiar de profesión en nuestro país, y 5 millones de empleos están en riesgo de desaparecer como consecuencia de la automatización. Por otro lado, el Foro Económico Mundial estima que la tecnología creará 97 millones de nuevos empleos para 2024, 12 millones más de los que destruirá. Ante este escenario, en los años venideros se hará latente en España la creación de numerosos empleos en los que será necesaria la inteligencia humana. La capacidad de interpretación contextual, la empatía o el razonamiento ético que posee el abogado son aspectos fundamentales en el ejercicio de la profesión, por lo que hay que ver los cambios como una oportunidad.
© 2001-2025 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados