María Ángeles Martínez Ruiz, Narciso Sauleda Parés
Este estudio pretende abordar los problemas que plantea el currículo referido a la constitución profesional de la identidad de los profesores. Nuestros afanes van dirigidos a una búsqueda intelectual que no se limite a la reproducción de las fórmulas y estereotipos usuales, ya que la sociedad actual es cada día más compleja y, consecuentemente, la investigación educativa tiene la necesidad de afrontar el reto de vivir con la ambigüedad y la incertidumbre. La complejidad actual urge la introducción de sistemas de desarrollo adecuados para la educación de los educadores y psicopedagogos. En cualquier caso, la mejora de la educación de los profesores pasa por conseguir que los profesionales del campo sepan abordar el problema de la equidad de las diferentes poblaciones de estudiantes, se sientan capaces de participar en la organización social de los centros, dominen nuevos sistemas de evaluación y sean capaces de comprometerse con la renovación de la educación.
Desde el escenario de la complejidad hay que aprender a huir de la simplicidad y de la certeza absoluta y confiar en el poder de la contradicción, en una multiplicidad de teorías y en las potencialidades evolutivas de un conocimiento provisional. Asumimos la creencia de que los conocimientos no están definitivamente terminfados, entendemos que se hallan en cambio permanente y que el trabajo en la frontera del conocimiento urge enfoques que evidencien las tensiones teóricas entre una diversidad de perspectivas, lo que, inequívocamente, es un elemento esencial en la generación del conocimiento. En concordancia con las epistemologías feministas (Harding, 1998), este texto analiza, pues, la profesionalización de los profesores desde la asunción de que el método científico puede ser mejorado por nuestra apreciación de la riqueza de los recursos intelectuales que podemos ganar valorando y promoviendo la diversidad cognitiva.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados