Introducción y justificación.
Tras más de 30 años de múltiples esfuerzos por parte de gobiernos y administraciones de todo el mundo, la investigación educativa ha concluido que el éxito de los programas de integración de las tecnologías digitales en educación ha sido moderado. A medida que los años avanzaban, el protagonismo del instrumento en sí disminuía, aumentando la importancia de la figura del docente como agente transformador en estos procesos. Este aspecto se evidenció de forma dramática con la pandemia de la COVID-19.
Esta tesis doctoral tiene como finalidad demostrar, de una manera sistemática, organizada y consciente, la importancia de la figura del docente como verdadera palanca de cambio en la compleja ecuación de realidad que representan entornos educativos mediados por tecnologías digitales.
De forma transversal, se da respuesta a una de las evidencias que la literatura previa parece mostrar: la investigación y el modo de abordar la realidad de los ecosistemas de aprendizaje mediados por tecnologías parecen atravesar un estancamiento que no se traduce en propuestas reales que se materialicen en realidades tangibles a nivel pedagógico. Toda la investigación representará un punto de partida para una integración novedosa procedente del ámbito de las ciencias de la salud: el uso de las Ciencias de la Implementación en la Educación.
Desarrollo teórico La investigación se desarrolla con un enfoque dual: por un lado, una perspectiva retrospectiva basada en una revisión sistemática de la literatura, analizando 316 referencias; por otro lado, una visión prospectiva implementada mediante un estudio Delphi, en el que participaron 23 expertos en tecnologías digitales provenientes de diversos niveles educativos.
Conclusión La revisión sistemática de la literatura evidencia que el término competencia digital docente ha pasado por varias fases de evolución conceptual, abarcando desde la alfabetización digital y mediática hasta una nueva tendencia que aborda como término de concepción holística, competencia digital profesional. Asimismo, se evidencia que de las variables analizadas que interfieren en el desarrollo de la CDD, la formación, tanto permanente como continua, resulta determinante en el éxito de estos. De igual modo, las actitudes del profesorado actúan como catalizador de dichos procesos. En relación con el estudio Delphi, se evidencia que los docentes corroboran la importancia de la formación y su diseño como variable de éxito.
Esta tesis contribuye con dos grandes aportaciones: un modelo de categorización de variables que permite categorizar y comprender las mismas y su influencia, así como la implementación de las ciencias de implementación en educación abordadas inicialmente a través del marco CFIR.
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