María Dolores Marrodán Serrano, María Dolores Cabañas Armesilla, María Margarita Carmenate Moreno, Marisa González Montero de Espinosa, Noemi López-Ejeda, Jesús Román Martínez Álvarez, Consuelo Prado Martínez, Juan Francisco Romero Collazos
Introducción y objetivos El avance de la hipertensión en edad temprana puede atribuirse al incremento de la obesidad. El objetivo es analizar la repercusión del exceso ponderal, el grado y la distribución de la adiposidad en la presión arterial de población escolar española.
Métodos Estudio transversal sobre 1.511 escolares de 6 a 16 años. Se midió peso, talla, perímetro de la cintura, pliegues adiposos y presión arterial. Se establecieron categorías nutricionales a partir del índice de masa corporal, el índice de cintura-talla y el porcentaje de grasa. Siguiendo al National High Blood Pressure Education Program Working Group, se consideró con presión elevada a los sujetos que superaban el percentil 90 del estándar.
Resultados Presentaron presión arterial elevada el 3,17% de los niños y el 3,05% de las niñas. Según el análisis de la odds ratio, el riesgo aumentó en los sujetos con índice de masa corporal indicativo de obesidad (7,87 veces en niños, 12,32 en niñas), con porcentaje de grasa superior al percentil 97 (6,98 veces en niños, 18,51 en niñas) o con un índice de cintura-talla ? 0,5 (10,56 veces en niños, 7,82 en niñas).
Conclusiones El sobrepeso y la obesidad aumentan la probabilidad de tener presión elevada entre los 6 y los 16 años, aunque el riesgo varía en función de la cantidad y la localización del tejido adiposo. Los indicadores antropométricos de adiposidad relativa y distribución de la grasa son especialmente útiles para identificar a los niños y adolescentes con presión arterial elevada.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados